Marina Gržinić                                                                                                                                 [english] –>
Nosotrxs, lxs refugiadxs, hacemos la manifestación y nosotrxs somos lxs que la queremos. Es nuestra lucha. Agradecemos a todxs por su ayuda, pero no permitimos que nadie nos use. Esta es una lucha autoorganizada de y por lxs refugiadxs, una que necesita su apoyo y su presencia en la calle el sábado.
Del discurso del refugiado Salaheddine Najah durante un certamen de canción protesta en el Teatro Rabenhof, Viena, 12 de febrero de 2013

PARTE 1: Protestas y acciones

La intención de este texto es abrir una discusión sobre soluciones y repensar el marco dentro del cual tiene lugar el movimiento autoorganizado de refugiadxs. El hecho es que el movimiento y las demandas presentadas por lxs refugiadxs son de importancia histórica. Por primera vez, lxs refugiadxs se auto-organizan y comienzan un debate público sobre el tema del asilo y los derechos humanos. Esto generó la formación de una plataforma política con demandas para cambiar la situación de lxs refugiadxs en Austria y en la UE en general.

En marzo de 2012, en Würzburg, Alemania, lxs refugiadxs comenzaron una lucha para obtener los derechos humanos más elementales.[1]

Desde mayo de 2012, se han organizado huelgas de refugiadxs en Dinamarca, Turquía, Bulgaria, Grecia, Francia, los Países Bajos y Austria. Las protestas en Alemania, los Países Bajos y Austria formaron, en efecto, una plataforma de fuerzas unidas. Está previsto un Congreso de Refugiadxs para marzo de 2013 en Munich, Alemania, donde lxs participantes discutirán acciones futuras, órganos organizativos y una lista de demandas políticas que tendrán como objetivo cambiar las terribles condiciones para refugiadxs y solicitantes de asilo en la UE y Europa.

Desde noviembre de 2012, lxs refugiadxs protestan en Austria.[2]

En el centro de esta protesta se encuentra la formación de la Acampada de Protesta de Refugiadxs de Viena, que comenzó con una marcha de diez horas con un centenar de refugiadxs y aliadxsa proximadamente. La marcha, que tuvo lugar el 24 de noviembre de 2012, comenzó en el centro de recepción de refugiadxs en Traiskirchen y finalizó en el centro de la ciudad de Viena, a una distancia de unos veinte kilómetros. La marcha dio lugar a la construcción de la Acampada de Protesta de Refugiadxs, que incluía tiendas de campaña, una cocina y actividades en el Parque Sigmund Freud, frente a la Iglesia Votive en el centro de Viena. Este campo fue desalojado por la policía el 28 de diciembre de 2012. Después de negociar con el personal de la Iglesia Votiva, lxs refugiadxs entraron a la iglesia y decidieron «acampar» en el frío edificio (mientras que, al mismo tiempo, eran supervisados ​​y controlados por Caritas, una organización de ayuda caritativa limpia-culpas de la Iglesia Católica). Ya que en ese momento no se les ofreció nada -ninguna respuesta de las autoridades con respecto a sus demandas- un grupo de refugiadxs inició una huelga de hambre.

La Acampada de Protesta de Refugiadxs de Viena fue apoyada por múltiples ONG y muchxs activistas y estudiantes, incluido un número de la Academia de Bellas Artes de Viena. La huelga de hambre terminó después de un mes (en enero de 2013) y el propio arzobispo prometió a lxs refugiadxs que podrían permanecer en la iglesia y que no serían expulsados por la policía.

El 1 de febrero de 2013, después de un descanso de diez días, lxs refugiadxs en la Iglesia Votiva anunciaron la reanudación de su huelga de hambre, ya que el gobierno no hizo ningún esfuerzo para satisfacer sus demandas de encontrar una solución con respecto a su situación legal. El 5 de febrero, uno de los huelguistas de hambre fue deportado a Hungría. Presumiblemente será expulsado de la Unión Europea o, peor aún, deportado a Pakistán. El 16 de febrero alrededor de 2.500 personas en Viena y otras ciudades de la UE marcharon en solidaridad con lxs refugiadxs, un día después de que lxs refugiadxs decidieron detener su huelga de hambre por segunda vez para considerar sus próximos pasos. A principios de marzo de 2013, lxs refugiadxs en protesta acordaron trasladar La Acampada de Protesta de Refugiadxs de Viena a un antiguo monasterio que les ofreció el cardenal austríaco Schönborn. En el monasterio se les ofrece asesoría legal y representación legal, un «espacio seguro» para continuar su lucha por cambiar el sistema de asilo.

En ese momento, el histórico movimiento auto-organizado de refugiadxs en Viena y en toda Europa cambia constantemente, ya que lxs refugiadxs son rehenes de los Estados «soberanos» europeos y la Fortaleza de las políticas de la UE. Lo que está quedando claro es, para usar palabras de Achille Mbembe, que la «buena conciencia de Europa…. ha querido ser responsable de nada, sin culpa de nada».[3]

[Refugiados en Viena, noviembre, 2012. Foto: Andreas Edler]

Las demandas de lxs refugiadxs de la Acampada de Protesta en Viena son dobles. Por una parte exigen mejores condiciones de vida, desde una alimentación adecuada hasta una vida social decente. (Lxs refugiadxs están completamente aisladxs en centros de refugiadxs que les impiden tener una vida social, de participar en la vida social y política más amplia de Austria). Quieren la oportunidad de aprender alemán y tener traductores profesionales que traduzcan con precisión sus demandas cuando se ven atrapadxs en el limbo de la burocracia estatal y son interrogadxs por el aparato estatal represivo. Otra parte de sus demandas es la más importante: el derecho a quedarse y el derecho al trabajo. Quieren ejercitar la autosuficiencia y no ser objeto de obras de caridad del Estado o de cualquier ONG.

Durante al menos una década, lxs refugiadxs han sido atrapados en una situación de abandono sistemático. Sus condiciones de vida en la UE se han deteriorado gradualmente. Este proceso fue descuidado por los Estados-nación en los países de la »antigua« Europa Occidental. Durante mucho tiempo, lxs refugiadxs han sido forzadxs sistemáticamente a una situación de empobrecimiento, privación y reclusión. Han sido víctimas de un proceso de discriminación racial que ha disminuido y despolitizado el concepto y el estatus de los derechos humanos. El régimen internacional de derechos humanos que se desarrolló en Europa Occidental después de la Segunda Guerra Mundial y que se ha extendido a nivel mundial ha llegado a un callejón sin salida. Debe repensarse y cambiar política, económica e ideológicamente para evitar que lxs refugiadxs queden a la merced de un régimen de encarcelamiento, exclusión, marginación y muerte.

[Cartel en la acampada de protesta de lxs refugiadxs, noviembre, 2012. Foto: Andreas Edler.]

Lxs refugiadxs decidieron salir de tal situación. Comenzaron no solo haciendo demandas, sino también realizando y representando la igualdad política en el espacio de la Unión Europea preestablecida por la desigualdad política, social y económica. La UE sobrevive con una reproducción constante de la desigualdad, que es el axioma del capitalismo global neoliberal. Lxs refugiadxs rompieron ese espacio predeterminado de la política en el que solo lxs actores predeterminados, digamos lxs ciudadanxs, tienen visibilidad y se les toma en serio al exigir derechos democráticos. Pero las luchas y demandas de lxs refugiadxs -quienes, en las palabras de Jacques Rancière, pertenecen a la «parte-de-no-parte» en la presente realidad política capitalista global- se impusieron de una manera que obligó a la gente de Europa a considerarlos como iguales.[4] Al hacerlo, re-politizaron y rearticularon el espacio de Europa, imponiendo el axioma de igualdad en un espacio de desigualdad.

Lxs refugiadxs no pidieron «algunos» derechos que solo les permitieran ingresar y tal vez participar en el espacio de lo político y lo social. No estaban cautivos de una vieja idea modernista que espera su lugar en la arena política, un lugar reservado solo para aquellxs que ya se consideraban pertenecientes al espacio político; por ejemplo, ciudadanxs del Estado nación con su forma de buena vida. (una «buena» vida que también se deteriora para ellos en tiempos de crisis). En cambio, lxs refugiadxs se apropiaron del espacio que se veía como inaccesible para ellxs. Por lo tanto, cambiaron las coordenadas de la noción establecida y salvaguardada de des/igualdad. En realidad, subvirtieron todo el espacio de la política tradicional. Su acción auto-empoderada fue una sorpresa, y abrió la posibilidad de exigir cambios de las leyes de los Estados-nación de la UE. Sus acciones obligarán a las ONG y activistas que les apoyan a reorganizarse y reorganizar sus luchas.

Esta plataforma política surgió con fuerza cuando lxs refugiadxs simbólicamente rechazaron el Premio Ute Bock por Coraje Moral, que les fue entregado en enero de 2013 en Viena. Por un lado, lxs refugiadxs agradecieron a lxs organizadorxs del Premio Ute Bock por dárselos, pero por otro lado, afirmaron que no necesitaban caridad, sino derechos (humanos) políticos y económicos, es decir, ¡quedarse y trabajar!

Por lo tanto, lxs refugiadxs repolitizaron el espacio de lo político no simplemente pidiendo ser incluidxs, sino apropiándose del espacio. Demostraron que tanto la política como lo «humano» en «derechos humanos» son resultados de un proceso de reconfiguración y repolitización, como lo describe Rancière. Abrieron la posibilidad de igualdad en una situación de desigualdad estrictamente controlada y constantemente reproducida.

Las acciones de lxs refugiadxs muestran que no hay dos tipos de seres humanos, ciudadanxs y no ciudadanxs. ¡O todxs somos ciudadanxs o todxs somos no ciudadanxs! Esta conclusión salió a la luz en una charla pública de uno de los refugiados de la Acampada de Protesta de Refugiadxs de Viena. Él imploró al público austríaco: «Ustedes son ciudadanxs que respaldan nuestras demandas. Por lo tanto, ¿por qué no exigen que sus representantes políticos, que ustedes, como ciudadanxs, han elegido, cambien esta situación insoportable? La respuesta fue un completo silencio.

Las demandas de lxs refugiadxs plantean una serie de preguntas y problemas que se dirigen no solo a los regímenes biopolíticos de los países de la »antigua« Europa Occidental de la UE, sino a todo el concepto occidental de derechos humanos tal como se desarrolló después de la Segunda Guerra Mundial. Hasta la caída del Muro de Berlín en 1989, los derechos humanos y la política de asilo se usaban predominantemente para reproducir la división entre Europa del Este y Europa Occidental. El Este fue presentado como un espacio totalitario, mientras que el Occidente era un lugar de democracia y respeto de los derechos humanos. La política de derechos humanos ha sido uno de los principales escudos utilizados por los regímenes capitalistas democráticos en Occidente para desviar las discusiones sobre la realidad fascista de Europa Occidental después de la Segunda Guerra Mundial.

La cuestión de los derechos humanos comenzó a desintegrarse visiblemente después de la caída del Muro de Berlín. Después de 1989, la aparición del capitalismo global hizo que la política de refugiados y de asilo en Europa se deteriorara. Se dice que las restricciones de empleo impuestas en la UE de hoy están destinadas a proteger a lxs ciudadanxs de la UE, especialmente en Europa Occidental, para que su nivel de vida no disminuya. Somos conscientes de que los salarios han permanecido estancados durante una década. Las protestas en los espacios públicos de la democracia europea son frecuentemente reprimidas por la policía y las fuerzas militares (autorizadas por leyes que se originaron en la época colonial, como es el caso de Francia).[5]

En la biopolítica de Occidente, lxs ciudadanxs son fuertemente diferenciados en términos de diferenciación de clase, género y raza, discriminaciones y explotaciones que se multiplican a nivel mundial. Esta no es solo una cuestión de «diversidad», tal como se presenta constantemente al público. Por el contrario, el antiguo proletariado se transformó en precariado, y cada vez más se ve a sí mismo como «lxs condenadxs de la tierra». La perspectiva del mundo vista desde el lado de lxs colonizadxs, como ha sido formulada en la famosa obra de Frantz Fanon escrita durante la lucha anticolonial argelina de la década de 1960, muestra que la biopolítica de la UE se reproduce constantemente por y a través de la necropolítica.

El segundo gran cambio en el estatus de los derechos de lxs refugiadxs ocurrió después del 11 de septiembre de 2001. Los estados capitalistas individuales impusieron sus propias leyes y, al hacerlo, infringieron el derecho internacional y los derechos humanos universales. Anthony Burke escribió sobre esto en un texto publicado en 2002 en el primer número de la revista australiana e-borderlands. Afirmó que lo que teniamos ahora en frente era «un mundo donde el terror se encuentra con el terror, donde la seguridad se basa en la inseguridad, donde la política del miedo y la inevitabilidad del conflicto -no la libertad o la justicia- parecen ser las únicas cosas que perduran». El resultado fue, como lo explicó Burke, que los patrones normalizados de violencia y coerción, en forma de seguridad interna, vigilancia y «disuasión» de los solicitantes de asilo, ocuparon un lugar central en el capitalismo global. Suvendrini Perera, en su texto »What is a Camp…?” publicado en el mismo número, también cuestiona las categorizaciones problemáticas y fluidas que animaron las políticas de seguridad posteriores al 11 de septiembre. [6] Habla de la guerra contra el terror como una «categoría de confusiones y extraños desdoblamientos».

Como Achille Mbembe escribió en referencia al despojo de la vida en África, «el capitalismo global no puede expandirse sin lo que deberíamos llamar subsidios o descuentos raciales masivos». Como señala Mbembe, «[el capitalismo] necesita trabajar a través de diferentes escalas de raza, ya que trata de marcar a las personas como desechables o como desechos. Necesita producir, ordenar, segmentar y racializar poblaciones sobrantes o superfluas para lograr un efecto estratégico.»[7]

Echemos un vistazo a una genealogía de este proceso de producción de masivos subsidios raciales, y la brutal racialización del espacio social, político, cultural y económico de la Unión Europea después de 1989. [8] Después de la caída del Muro de Berlín, se consideró obsoleto hablar de cualquier tipo de división Este/Oeste. Pero, gradualmente, el binario «externo» se transformó en un proceso interno de divisiones, fragmentaciones, clasificaciones y discriminación basada en raza, clase y género. Antes, teníamos dos regímenes -el socialismo y el capitalismo- con una miríada de constelaciones entre ellos; hoy tenemos un sistema que produce una fragmentación constante de muchos conceptos históricos clave. Si anteriormente se hablaba de vida o muerte, hoy tenemos una diferenciación dentro de cada categoría. La gran ruptura ocurrió en la década de 1990 cuando Giorgio Agamben hizo una distinción conceptual dentro de la categoría de vida: una distinción entre «forma de vida» y «vida desnuda». (Esta ruptura coincidió con la «desaparición» de fronteras post -Guerra Fría.) Agamben descuidó extender su análisis a la muerte. Esto solo ha sucedido en el trabajo de Achille Mbembe cuando acuñó el término «necropolítica» en 2003.

[21 de febrero de 2013. Foto: Daniel Hrncir]

La lista de las víctimas del capitalismo está dividida desde adentro. Algunas víctimas tienen un estatus más alto, mientras que otras carecen de importancia. A través de este proceso, el proyecto de desposesión cristiano capitalista no permite que ninguna «identidad» adquiera una posición desde la cual denotar el capitalismo como tal. Las identidades están de hecho enfrentadas entre sí, sin entender que son un producto de los procesos de racialización, presentado en el sistema capitalista como una especie de política de identidad. La promesa de liberación por el capital es, por lo tanto, una medida paradójica y cínica donde la liberación se presenta como una infinidad de fragmentaciones. En el trabajo aquí está el proceso de racialización del capitalismo, un eje de control sobre el cual se conciben formas infinitamente diferenciales de expansión capitalista.

El racismo estructural es la lógica central del capitalismo global. La racialización es su procedimiento interno administrativo, judicial y económico, que regula el espacio del capitalismo financiero, así como el sistema de representación, teoría y discursividad. El racismo no es solo una política de identidad sino algo interno a toda la agenda de la transformación del Estado-nación bajo el capitalismo global. Es posible argumentar que en el pasaje del Estado-nación al Estado-guerra, que es la forma contemporánea de los antiguos Estados-naciones imperiales del pasado, nos topamos con una formación específica: el Estado racial. Todos los Estados de la UE son raciales, como lo demuestra la forma en que han manejado la política de refugiadxs y de asilo.

Esto quiere decir que lo que está en la base del proceso de la política de identidad no es simplemente un proyecto multicultural de diferenciación en la sociedad, sino un proceso de racialización que en realidad está en el centro de las sociedades capitalistas globales contemporáneas. La política de identidad que hemos definido como el producto de un proceso de multiculturalización en las sociedades capitalistas contemporáneas es, de hecho, un proceso de racialización.

[Lxs refugiadxs acamparon dentro de la iglesia Votiva, Austria. Bwag/Wikicommons.]

Al mismo tiempo, las estructuras de control homogéneas permanecen en las manos de aquellos que han «definido» los propósitos del espacio público capitalista, es decir, los centros capitalistas del primer mundo colonial. Estos han creado la pretensión de que el centro homogéneo permite una libertad sin precedentes para la diferencia heterogénea, ¡siempre y cuando estas diferenciaciones no se vuelvan políticas!

Por otro lado, el racismo estructural y los procesos de racialización están »ocultos« en el capitalismo global, que nos pide que no hablemos de racismo. El capitalismo contemporáneo niega el racismo, afirmando que pertenece a la era del colonialismo, antes del mundo global en el que vivimos hoy. O más precisamente, se prohíbe hablar de racismo como demanda normativa, mientras que la racialización sigue siendo la principal lógica de diferenciación en los espacios sociales, políticos y económicos del capitalismo global.

La racialización no es solo un proceso de producción de tropos: no se trata solo de un proceso de narrativización del capital de sus, por así decirlo, niveles inmanentes de desposesión; la racialización es un proceso inherente al capital mismo, o más precisamente, a su marco blanco. El proceso de racialización interno del capital funciona como un «movimiento serpenteante», que se manifiesta como una transición del capital cognitivo al capital financiero, donde el moldeado no es cultural, sino racial. Tal vez la próxima etapa en el moldeado será, o ya es, una transición al «capital humano» que se apropia del espectro de significados asociados con la palabra «humanidad». Esto permitiría que el capitalismo representará a sus antagonistas como los últimos anti-humanistas. Como Achille Mbembe ha notado,

«Lo que distingue nuestra era de las épocas anteriores, la brecha sobre la que aparentemente no hay vuelta atrás, la división absoluta de nuestros tiempos que divide el espíritu, y lo divide en muchos, es nuevamente una existencia contingente, dispersa e impotente. Esta existencia que es contingente, dispersa e impotente, se revela bajo el disfraz de la arbitrariedad y el poder absoluto de dar muerte en cualquier momento, en cualquier lugar, por cualquier medio y por cualquier motivo.»[9]

La noción de existencia impotente en el contexto de racialización y representación, teoría y discursividad, no debe tratarse en términos binarios que implicaría la existencia de una relación de dicotomía entre el dominado (impotente) y el dominador (quien acarrea la muerte). El «disfraz de arbitrariedad» debe ser visto como la capacidad del poder hegemónico para dar muerte en cualquier momento, mientras que la existencia impotente no debe verse como una posición a priori, sino como una propiedad que ha marcado el cierre de la distancia entre el subyugador y el subyugado, neutralizando el antagonismo entre los protagonistas paradigmáticos en la cosmología del poder. Es precisamente esta arbitrariedad la que se emplea en los procesos de (sub) contratación, deportación y diseños de estrategias que son parte de los procedimientos de un centro de refugiadxs cuando se otorgan o rechazan documentos para permanecer, trabajar o vivir. En cierto modo, la arbitrariedad establece una conexión coherente entre la racialización y el sistema que la sostiene.

[Conferencia de prensa en la iglesia Votiva, 5 de febrero de 2013. Foto: Daniel Hrncir.]

También es importante exponer el hecho de que el proceso de racialización que opera en los centros de refugiados y de asilo, y en todo el sistema de políticas de refugiados en Europa, permite una estructura de racialización brutalmente perversa. La racialización proporciona una especie de «reloj interno» o un «conjunto de pautas» utilizadas por la ideología racista blanca capitalista, que puede verse como la encarnación de una prohibición organizada sobre la base de «aplastar todas las prohibiciones», pero solo cuando se presenta como la capacidad del régimen para posicionarse «antagónicamente» hacia su propia ideología racista. Por ejemplo, los partidos políticos en el poder en la UE afirman que les gustaría hacer algo con respecto a la situación que no es en absoluto «un caso» de política discriminatoria, sino simplemente un efecto de las leyes y reglamentos que lamentablemente tardan en cambiarse.

Esta arbitrariedad, como argumenta Achille Mbembe, «cumple su propio trabajo y se valida a sí misma a través de su propia soberanía, y por lo tanto permite que el poder se ejerza como un derecho a matar.»[10]

Por lo tanto, la arbitrariedad no funciona como una máscara para la ausencia de una «posibilidad» profunda. Tampoco es una «nueva forma» del capitalismo basada en la transgresión obligatoria. Más bien, la arbitrariedad es el síntoma de una ideología basada en el vacío total, o más precisamente, en el vacío que está siendo llenado por la transgresión. El horizonte capitalista necropolítico (el que produce un abandono puro de la vida y al mismo tiempo la activación de la máquina de guerra) toma el racismo como un terreno «legitimador» para sus procesos de discriminación y despojo, presentando el racismo y la racialización como una especie de proceso modernista «benigno» (podríamos decir casi atávico) de narraciones infinitas. Estas narraciones se presentan como una irregularidad pura (y no como un proceso sistemático), por lo tanto, como un marco «errático» que fomenta las luchas por la prominencia de la identidad, la cultura y la raza dentro de las jerarquías de la explotación.

PART 2: Epílogo(s): la continuación de la profundización sistemática de la miseria, las restricciones, las expulsiones y los finales abiertos de las luchas

En 2014

https://refugeecampvienna.noblogs.org/post/2014/06/20/saturday-21062014-votivpark-gathering/

20.06. 2014

Como en los últimos meses se produjo más bien el silencio en torno a las protestas de refugiadxs y contra la deportación, ya es hora de que las personas que quieren actuar contra el régimen fronterizo europeo y el sistema de asilo austríaco se conecten. Por tanto, queremos volver a reunirnos regularmente para conocernos y actuar juntos por la libertad de movimiento y la igualdad de derechos políticos y sociales para todos

25.11.2014

https://refugeecampvienna.noblogs.org/post/2014/11/25/2-jahre-nach-dem-marsch-von-traiskirchen-nach-wien-refugee-aktivisten-ziehen-bilanz/

2 años después de la marcha de Traiskirchen a Viena. Lxs refugiadxs activistas hacen un repaso:

El 24 de noviembre de 2012, más de 200 refugiadxs en protesta marcharon desde Traiskirchen a Viena. El mismo día, la Acampada de Protesta de Refugiadxs en Viena se construyó en el Parque Sigmund Freud y fue seguida por varios meses de la ocupación de la Iglesia Votiva. Lxs refugiadxs protestaron contra las imposiciones del sistema de asilo de Austria y exigieron derechos fundamentales: libre elección de residencia y acceso a vivienda pública; no al traslado en contra de la voluntad de los afectados; acceso al mercado laboral, instituciones educativas y seguridad social; detener las deportaciones y abolir el Reglamento Dublín II; un organismo independiente para revisar todos los procedimientos de asilo negativos; Reconocimiento de motivos socioeconómicos de escape; eliminación de las huellas dactilares de lxs refugiadxs y el derecho a seguir adelante.

La situación actual en Traiskirchen y otros campos en Austria muestra enfáticamente que todas estas demandas continúan abiertas. Algunxs de lxs participantes en el movimiento de protesta de lxs refugiadxs han logrado obtener un derecho de residencia en Austria, mientras que 8 personas han sido deportadas, 6 lo han sido a causa de la criminalización de la campaña bajo el cargo de los llamados «Schlepperei» [que se define en la ley austriaca (artículo 114) como «facilitar la inmigración ilegal de un extranjero o transitar por un Estado miembro de la Unión Europea o un país vecino de Austria con el objetivo de enriquecerse a sí mismo o a una tercera persona a través de un pago recompensa.»Schleppen” significa en alemán en general «remolcar”, «llevar» como se usa para cosas realmente pesadas. Con el prefijo «ein-» («einschleppen») puede usarse, por ejemplo, para describir que los europeos trajeron ciertas enfermedades a las Américas, cuando comenzaron a navegar a través de los océanos. Observación de Gržinić]

Numerosos participantes de la Protesta de Refugiadxs de Viena se enfrentan a un futuro incierto, ya que aún esperan la decisión sobre sus solicitudes de asilo.

En 2015

https://refugeecampvienna.noblogs.org/

El 21 de mayo de 2015, la crème de la crème del racismo europeo se reunirá en Varsovia, Polonia para celebrar el décimo aniversario de la agencia fronteriza de la UE Frontex, una de las metaorganizaciones más influyentes de la Europa Fortaleza. Los grupos de Refugiados y Sin Fronteras están convocando los días de protestas y resistencia en Varsovia del 19 al 22 de mayo. En Viena, nos unimos a esta lucha con un mitin frente al ACNUR y con acciones descentralizadas contra el régimen fronterizo de la UE.

Retroceso masivo contra refugiadxs y migrantes -El ministro del Interior austriaco, Mikl Leitner, recientemente exigió llevar a lxs africanxs salvados en el mar Mediterráneo directamente a los campos de «recepción» del ACNUR en el norte de África-. Todas estas políticas militarizadas anti- refugiadxs y migrantes nunca resolverán las razones de las personas para huir de países destruidos por las guerras y la explotación económica! Solo crearán condiciones aún más peligrosas a lo largo de las rutas de viaje y matarán a muchas más personas que están en movimiento. A diferencia de todo esto, existen demandas concretas que podrían fácilmente poner fin a la muerte de personas que se dirigen a Europa: entrada sin visados ​​al territorio de la UE para TODXS.

Mientras tanto, los mismos políticos austríacos, que simularon estar sorprendidos por la muerte de migrantes y refugiadxs, están planeando una reestructuración fundamental de la Ley de asilo austríaca que aumentará la pobreza y la exclusión social, junto con la deportación acelerada. Una consecuencia directa de la nueva Ley de asilo será que muchos refugiadxs serán expulsados ​​de «Grundversorgung» y obligados a vivir sin hogar en las calles. Esta nueva Ley de asilo entrará en vigencia a partir del 1 de julio de 2015.

https://www.dw.com/en/austria-shifts-further-to-the-right-with-hardline-asylum-policy/a-43459994

En las instalaciones de Traiskirchen, que fue el punto de partida de la Acampada de Protesta Refugiadxs de Viena, estaban encerradxs en 2015 miles de refugiadxs en un campamento escuálido. Durante el verano, los medios locales no tenían información sobre las instalaciones de Traiskirchen. Varios medios de comunicación locales solicitaron permiso para entrar, pero fueron rechazados. Se dijo que las solicitudes tenían poco tiempo de aviso, o que no había nadie disponible para mostrarlo a los periodistas. Incluso a Médicos Sin Fronteras se le negó el acceso. «Las condiciones en el interior son horribles. Es por eso que no está permitido entrar», dijo Magd, un joven refugiado de Damasco, a GlobalPost durante una visita reciente a Traiskirchen.

Hasta hoy, muchxs de lxs refugiadxs han sido procesados ​​y reasignados, y en general, el gobierno federal y los poderosos gobernadores provinciales han intensificado el control sobre cómo distribuir la población. Con 2.600 personas, Traiskirchen ahora tiene 800 residentes por encima de su capacidad.

En 2016

https://www.theguardian.com/cities/2016/apr/04/vienna-migration-crisis-refugees-refuge-cities-residents

Después de que 788.000 migrantes (muchxs en su camino a Alemania y Escandinavia) el otoño pasado pasaron por Austria y 300.000 por Viena en cuestión de semanas, el flujo se ha reducido drásticamente y el pico de la crisis, al menos por ahora, ha pasado. A Viena le quedan unos 21.600 refugiadxs registrados para recibir asistencia social básica, aproximadamente la mitad de los cuales se encuentran en el proceso de solicitud de asilo. Unas 4.600 personas siguen alojadas en grandes refugios de emergencia, principalmente oficinas en desuso, con más de 200 camas, pero la mayoría ya se han encontrado en casas y albergues más pequeños en todos los distritos de la ciudad. Aunque derrotado, el Partido de la Libertad, de extrema derecha y anti-migrante, obtuvo el 31% de los votos, su puntaje más alto en las elecciones locales, y ahora avanza en las encuestas de opinión a nivel nacional. Bajo la creciente presión política interna, el gobierno federal de Austria ha realizado un giro de 180 grados en su política de fronteras abiertas del pasado septiembre de 2015. Las protestas anti-migrantes organizadas por el Partido de la Libertad han llevado a enfrentamientos, con dos arrestos a principios de este mes durante un 1,000- fuerte manifestación contra un refugio de refugiados planeado en el distrito de Liesing de la ciudad.

Farnaz Mortazi, quien llegó a Viena procedente de Irán como estudiante en 1993, piensa que las actitudes solo se endurecerán. «Es muy temprano para decir cómo irá,» dice. «Por el momento, la gran mayoría de los vieneses son realmente acogedores, son buenas personas en sus corazones. ¿Pero en dos, tres años? No estoy tan seguro. La extrema derecha está haciendo lo peor, y como en todas partes, la gente esta susceptible a ella.»

En 2017

28.02.2017

https://www.politico.eu/article/austria-plans-to-stop-giving-food-and-shelter-to-rejected-asylum-seekers/

Austria planea dejar de dar comida y refugio a lxs solicitantes de asilo rechazadxs. El proyecto de ley del gobierno tiene como objetivo alentar a lxs solicitantes de asilo a irse voluntariamente.

«Lo primero es básicamente que no obtienen nada del Estado austriaco si no tienen derecho a quedarse aquí. ¿Es tan difícil de entender? «, Dijo el ministro del Interior, Wolfgang Sobotka, según Reuters.

Sobotka dijo que la ley, que necesitará la aprobación del parlamento, fue diseñada para alentar a lxs solicitantes de asilo rechazadxs a irse voluntariamente.

Según el ministro, unas 4.000 personas reciben servicios básicos, pero deberían haber abandonado el país. De ellas, alrededor de la mitad podrían verse afectadas si se aprueba la ley porque se consideran lo suficientemente saludables como para viajar a sus países de origen.

La mayoría de lxs solicitantes de asilo rechazadxs en Austria en 2016 procedían de Afganistán, Pakistán y Nigeria. Lxs solicitantes de asilo que mienten sobre sus identidades enfrentan una multa de € 5,000 o tres semanas en la cárcel.

En 2018

19.04 2018

Austria se inclina aún más a la derecha con la política de asilo de línea dura. La ultraderecha FPÖ de Austria aún se está ajustando a su nuevo rol en el gobierno, moderando su lenguaje pero no sus posiciones. La postura anti-inmigrante del partido todavía parece resonar con muchas personas en el país. El ministro austriaco del Interior, Herbert Kickl, miembro del Partido de la Libertad (FPÖ) de extrema derecha de Austria, presentó la nueva Ley de asilo del país a los periodistas. La nueva legislación, dijo Kickl, cierra las lagunas en el proceso de asilo, tal como el gobierno prometió. «Queremos una política de asilo restrictiva», dijo.

https://www.dw.com/en/austria-plans-to-toughen-asylum-policy-ease-deportations/a-43446419

28.05.2018

https://www.dw.com/en/austria-plans-benefit-cuts-for-non-german-speaking-foreigners-refugees/a-43965191

https://www.bbc.com/news/world-europe-44281683

Austria planea recortes de beneficios para lxs extranjerxs que no hablan alemán, refugiados. La coalición de derecha de Austria ha desvelado planes para limitar el pago de prestaciones a lxs extranjerxs, incluidxs lxs refugiadxs, que no hablan alemán. Este paso arriesga desafíos legales de la Unión Europea.

02.07.2018

Austria lleva la política de refugiados de línea dura a la UE. Austria asumió la presidencia del Consejo de la Unión Europea en julio, y su canciller ha convertido la política de refugiados en un tema clave. En la actualidad, lxs migrantes en el país que no aprenden suficiente alemán se enfrentan a recortes de los beneficios.

27.08.2018

Austria va a prohibir a lxs solicitantes de asilo la escolarización.
Austria tiene previsto prohibir a lxs solicitantes de asilo ocupar espacios vacantes de formación mientras se siguen evaluando sus reclamaciones. Marca el último en una serie de restricciones impuestas a lxs migrantes por el gobierno de derecha.

15.09. 2018

http://no-racism.net/article/5445/

Passau: ¡Protesta por la solidaridad a través de las fronteras!

El 15 de septiembre de 2018, lxs activistas se reúnen a ambos lados de la frontera entre Austria y Alemania. Las marchas de protesta se reunirán en Passau. Durante un mitin conjunto de clausura, las paredes de «Fortaleza Europa» caerán simbólicamente. Nosotrxs, activistas de Alemania y Austria, estamos indignados por los planes de nuestros gobiernos de cerrar las fronteras y construir más campamentos masivos para las personas. Es su política la que está matando a miles de personas en el Mediterráneo. CSU, AfD, ÖVP y FPÖ están forjando «ejes» en toda Europa para impulsar su agenda racista. ¡A Passau! Juntémonos por nuestra cultura de bienvenida y los derechos humanos indivisibles.

Una versión de este texto ha sido publicada en e-flux en 2013.
Marina Gržinić es filósofa, artista, investigadora en el Instituto de Filosofía ZRC SAZU (Centro de investigación de Academia de Ciencias y Artes, Ljubljana, Eslovenia) y profesora de Arte post-conceptual en la Facultad de Bellas Artes, Universidad de Viena. Con Aina Šmid han colaborado como videoartistas desde los años 80’ en más de cuarenta proyectos audiovisuales e instalaciones de nuevos medios presentando su trabajo en numerosos festivales y exposiciones en contexto local e internacional.
[1] Esto comenzó cuando lxs refugiadxs lanzaron una pequeña tienda de campaña en Würzburg. Desde entonces se ha convertido en un gran movimiento que se ha extendido por toda Europa. Ver http://refugeecongress.wordpress.com/english/
[2] Ver http://refugeecampvienna.noblogs.org/
[3] Achille Mbembe, Sortir de la grande nuit. Essai sur l’Afrique décolonisée [Debemos salir de la gran noche: Ensayo sobre África descolonizada] París: Éditions La Découverte, 2010, 171.
[4] Jacques Rancière, “Who is the Subject of the Rights of Man?” South Atlantic Quarterly Vol. 103, No. 2/3, (2004) 297–310.
[5] En su texto “French Suburbia 2005: The Return of the Political Unrecognized,” Rada Iveković escribe: “Cuando el gobierno [francés] reactivó la ley sobre el estado de emergencia [en 2005], aprobada durante la guerra de Argelia en 1955, los franceses se dieron cuenta de que la legislación colonial nunca había sido abrogada en primer lugar. Rada Iveković, “French Suburbia” 2005, in New Feminism: Worlds of Feminism, Queer and Networking Conditions, ed. M. Gržinić and R. Reitsamer, Vienna: Löcker, 2008.
[6] Suvendrini Perera, “What is a Camp…?”, e-borderlands Vol. 1, No. 1 (2002). Ver http://www.borderlands.net.au/vol1no1_2002/perera_camp.html
[7] Achille Mbembe, “Theory from the Antipodes: Notes on Jean & John Comaroffs’ TFS,” in Theorizing the Contemporary (2012).
[8] Ver mi investigación realizada junto con Šefik Tatlić: Marina Gržinić and Šefik Tatlić, “Global Capitalism’s Racializations,” 2011. Ver http://bijenaleumetnosti.rs/2012/download/De-Artikulacija2.pdf. En lo que sigue, reutilizaré partes de esta investigación.
[9] Achille Mbembe, On the Postcolony (Berkley and Los Angeles: University of California Press, 2001),13.
[10] Ibid.