Comunicado del grupo transfeminista antirracista de Barcelona

Barcelona, 27 de abril de 2017

El libro “Jornades Radical-ment feministes”, publicado en relación a las Jornadas de junio de 2016 y, que recopila las memorias del encuentro con la intención de continuar “escribiendo la historia feminista”, es una de las muchas violencias que diariamente experienciamos las personas racializadas y migrantes en el contexto local. Todavía hoy, después de décadas de luchas y críticas al feminismo blanco occidental, nos encontramos en la misma situación que ha sido cuestionada, donde la historia se escribe borrándonos. En la historia colonial, parte del sistema capitalista y heteropatriarcal, está inscrita la ceguera europea, a pesar del origen geográfico e intelectual del concepto “raza” en Europa. ¿Por qué el racismo y los procesos de racialización que organizan la segregación europea se silencian? ¿Qué es lo que las feministas blancas occidentales tendrían que cuestionarse si realmente nos escucharan?

Mientras su lucha feminista y su discurso de la diversidad sigan sustentándose a través del silenciamiento del racismo y de los procesos de racialización, vaciando y despolitizando las alianzas de las que hablan, realizaremos intervenciones radicales en el propio sentido que este término evoca. Necesitamos desmantelar desde las bases las estructuras coloniales y capitalistas que nos construyen como “otrxs”, y que las feministas blancas occidentales reproducen orgullosas de su trabajo histórico por la liberación.

Una vez confrontadas con la incómoda verdad de su brutal historia argumentan no saberlo, no entenderlo, no recordarlo, no verlo, no creerlo. Nosotrxs vemos y sentimos el racismo en todas partes.

Al revisar las memorias de las jornadas, nos encontramos que:

No aparece el manifiesto que leímos en la inauguración y que ruló durante las jornadas: “Todo feminismo que no sea antirracista, es un feminismo racista”.

Hay fotos en las que aparecen nuestras cuerpas, pero no la interpelación que hicimos: La foto del costado de la pancarta -sin que se la pueda leer- nos despolitiza y muestra como vaciadas de contenido. No nos hace sentir bien que bajo la leyenda “diversidad” se haga constar que estuvimos allí mientras lo que no se dice es el cómo: Intervenimos porque sentimos que el hecho de estar presentes a través de contenidos del programa, talleres y mesas redondas, no necesariamente implica una autocrítica colectiva en relación a las desigualdades, discriminaciones y racismo que son parte de la estructura en la que habitamos.

En el libro de las Jornadas resulta especialmente impactante la imagen de la contraportada en que se observa la transfusión de feminismo de una blanca a una negra (a la que se le “alumbra la bombilla”). El racismo de la misma es tan explícito que no entendemos cómo se les ha pasado, y nos extraña especialmente que a compañeras que pensábamos estaban sensibilizadas con este eje de opresión que denunciamos. Precisamente la demanda era que las “gafas violetas” también fueran gafas antirracistas.

Nuestro malestar es que han silenciado y vaciado nuestra intervención, no nos han preguntado cómo queremos estar, si queremos o no salir en las fotos, etc. Hay compañeras que dijeron que no querían aparecer en las memorias, otras que si querían estar registradas y no aparecen a pesar de haber sido parte de alguna mesa. Las fotos nos muestran bailando….sin embargo no aparece nuestra propuesta política!

El uso que hacen de nuestra intervención en las Jornadas habla de la capitalización de nuestros reclamos para sus beneficios propios, personales y colectivos, donde no solo se borra sino se nos asimila en su lenguaje políticamente correcto, tal como podemos leer en una de las descripciones que acompañan la foto: “Jornadas que dieron lugar a la diversidad”. Como migrantes y racializadxs reconocemos cotidianamente vivir en un contexto colonial, racista y xenófobo y de esto el feminismo tampoco se escapa.

Por último, queremos añadir que este comunicado no va dirigido a lxs compañerxs que participaron y que expresaron un discurso crítico y antirracista en las jornadas, sino que se publica como respuesta crítica a lxs organizadrxs, editorxs y responsables de las Jornadas así como de la edición del libro “radicalmente racista”.

NO HABLAR POR OTRAS, NO OMITIR SUS DISCURSOS SON MUESTRAS DE RESPETO FEMINISTA ENTRE COMPAÑERAS.

¡EL EXTRACCIONISMO COLONIAL TAMBIÉN ES DE SABERES Y HACERES!

¡NO SE PUEDE SER RADICALMENTE FEMINISTA SIN SER RADICALMENTE ANTIRRACISTA!


*Intervención realizada sobre las imagenes – ilustraciones publicadas en el libro «Jornadas Radical-ment feministes«, Barcelona, junio de 2016