Hoy salimos a las calles del Reino de España diferentes comunidades migrantes, refugiadas, no blancas y aliadas para denunciar la violación estructural, racista, machista y clasista que llevan sufriendo desde hace décadas mujeres marroquíes en los campos del sur de España. Aquí estamos para soltar nuestra rabia contra el poder colonial -imperial del reino español y la Europa/frontera asesina y su política de muerte. Denunciamos la situación en la que se encuentran las hermanas jornaleras marroquíes, de explotación, de violaciones, vejaciones y hacinamiento en las campañas de colecta de la fresa en Huelva. Mujeres que están siendo atravesadas por la brutal violencia del patriarcado y el racismo de Europa, que no le basta con explotar sus cuerpos pagando poco por un trabajo duro y en malas condiciones, sino también violando sus cuerpos, dañando profundamente sus vidas. Madres, hermanas, hijas que están lejos de casa, de sus familias, que no conocen el idioma, por lo que son engañadas, y que aun así se han levantado con fuerza y dignidad para denunciar públicamente este sistema de opresión, pese a los mecanismos existentes para silenciar y perpetuar la situación, siendo por ello secuestradas y luego deportadas. Estas mujeres son MORAS, provenientes de las zonas más empobrecidas del territorio y elegidas bajo un perfil determinado, con cargas familiares para que no puedan salir de este círculo de explotación.

También queremos dejarle claro a la opinión pública de este país y de esta gran ficción llamada Europa que los cuerpos explotados-violentados-expulsados, no son solo los cuerpos feminizados. Europa se ha alimentado durante siglos y se sigue alimentando de la explotación de los cuerpos migrantes, de su trabajo, de su energía y de sus vidas, gracias a mecanismos como la Ley de Extranjería que permite utilizar y desechar nuestros cuerpos cuando estos ya no son necesarios. Mientras tanto Europa, siempre hambrienta, insatisfecha, saborea con cinismo los frutos que han crecido entre los campos de la esclavitud y los maltratos diarios. Nuestros cuerpos han sido inferiorizados desde la relación moderna-colonial como lo no blanco, lo no humano imponiéndonos una cultura, unos saberes, una religión y una cosmovisión. De este modo, las feminidades explotadas y esclavizadas por empresas europeas, no son simplemente mujeres, son cuerpos con una cultura, una religión determinada, una piel determinada, con unos conocimientos y de unos territorios concretos. Las jornaleras de las colectas de las fresas son MORAS, antes que mujeres. La mayoría de las trabajadoras de servicio doméstico y cuidados son cuerpos MIGRANTES antes que mujeres. No somos nosotras quienes nos hemos incluido o excluido de las categorías dominantes, es Occidente quien sigue queriendo encasillarnos dentro de sus mitos, y son sus políticas económicas decretadas por organizaciones como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, brazos del neo-colonialismo, las que nos condenan a los cuerpos no blancos a la pobreza y a tener menos posibilidades de vida. Por ello nos vemos obligadas a mantener a la inútil y bélica Europa, a sus súbditos y a su gran ficción, a costa de la explotación, utilización y extracción de nuestros territorios/cuerpos.

Denunciamos también la relación y ejercicio del colonialismo interno de nuestros territorios con el poder neo-colonial en sus agentes disfrazados en una falsa cooperación al desarrollo, ONG´s, que sirven de estructura para seguir alimentándose de la situación de pobreza que nos condena esa parte del mundo de donde vienen la gran mayoría de cooperantes, que impulsan élites económicas y políticas locales, permitiendo que continúe la esclavización de nuestros cuerpos; hoy tenemos la realidad de las hermanas moras jornaleras, donde queda en evidencia esta relación neo-colonial española. También podemos traer otras realidades como la continua destrucción de los sures (África y Abya Yala (lo que se conoce como Latinoamérica)), porque no solo son explotados y asesinados nuestros cuerpos sino también nuestros bosques, montañas, ríos… la vida de nuestra tierra, nuestra Pachamama se desangra para que la Europa consuma bienestar tecnológico y sus súbditos sean bien cuidados y alimentados.

Por último, queremos denunciar el silencio, no sólo administrativo, sino también por parte de las organizaciones no gubernamentales ante este brutal caso de las hermanas marroquíes jornaleras que viene siendo denunciado desde 2008 por diferentes asociaciones y personas marroquíes, así como también denunciar la situación de las hermanas trabajadoras del sector de los cuidados quienes han sido violentadas con la estafa de la enmienda 6777, y la no ratificación del convenio 189 de la OIT.

Hacemos un llamado a los distintos colectivos anti-capitalistas, anti-racistas, feministas, disidentes sexuales, ecologistas y otras aliadas a que no olviden que patriarcado, racismo y capital es la alianza colonial contra la que juntas debemos luchar.

Por esto exigimos:

-La derogación de la ley de extranjería como herramienta del racismo institucional vigente.

-Medidas que garanticen la seguridad física, sexual, económica y psicojurídica para las hermanas marroquíes sin ninguna represalia.

-Documentación que permita el libre tránsito y acceso a servicios de salud y garantías laborales para las personas migrantes.

-Definición de una ruta crítica con acciones preventivas, de atención, mitigación y reparación inmediata dentro del marco jurídico de la La Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género.

-Revisión e inclusión dentro del Pacto Contra la Violencia de Género de medidas estratégicas específicas para las mujeres migrantes con o sin papeles.

El feminismo será antirracista o no será!

Movimiento de Acción Política Antirracista MAPA 12N